“Acabo de leer su Historia Secreta de la Iglesia Católica en España. Me ha parecido una síntesis muy esclarecedora de lo que ha sido la historia de España, expresada de tal forma que el principal parámetro es la influencia de dicha iglesia .
No he sido sorprendida el comprobar como la “nomenklatura” de la Iglesia ha actuado de forma desvergonzada contra los principios del cristianismo, para enriquecerse o mantener su poder y sus privilegios, porque he vivido muy de cerca, esto mismo , en una ocasión:
A principio de los años 70, un periodista , del entonces diario Pueblo, encontró un cuadro de la Santa Faz de Zurbarán en Torrecilla de la Orden, mi lugar de origen.El Estado lo requisó y a cambio dio un millón de pesetas.El cuadro , en cuestión , estaba en una ermita que tanto la Iglesia como el ayuntamiento se llamaban a posesión.!Qué bien le hubiese venido entonces a la Iglesia la ley de inmatriculación de Aznar¡.
Solo había un abogado “perro viejo” en todo Valladolid que se atrevía a llevar el pleito.El cura enfrentó a los habitantes del pueblo para que algunos testificaran a favor de la Iglesia.Tras perder en primera instancia , un buen día, el gobernador civil llama al alcalde y le dice que no hace falta que siga con el pleito ya que todo está arreglado, que se presente en el arzobispado.
A la cita acudieron el alcalde y el teniente alcalde. Les recibió el secretario del obispo y les ofreció , palabras textuales, “una generosa recompensa ” a cambio de retirar el pleito.Mi padre , que era el teniente alcalde,le respondió que eso mismo habían pensado ellos y que estaba seguro que su oferta iba a ser más generosa.Sin inmutarse,el secretario contestó que eso era gitaneo.Mi padre le respondió que ese mismo chalaneo lo estaba haciendo él. Aquello no le debió de gustar porque les amenazó con la excomunión.(Pensaba el secretario que la humanidad seguía en pañales).
El pleito lo volvió a ganar el ayuntamiento en segunda instancia y el cuadro se colocó en la sala principal del Museo de Escultura de Valladolid, junto al Cristo Yacente de Gregorio Fernández.
Hace muchos años que no voy por el museo.Espero que siga allí.
Saludos Don César”.