Entre los jóvenes valores hispanos que más me han impresionado en los últimos años se encuentra Gonzalo Chamorro. Creador del Instituto Crux, es un ejemplo de cómo se puede ser cristiano y pensar y, sobre todo, se puede ser cristiano sin hacer de ello una profesión. Ésta es una entrevista que tuvimos este verano y que a mi me pareció de especial interés por los temas abordados. Espero que la disfruten. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!
Palabras al aire con Sagrario Fernández-Prieto.
La historia de España con César Vidal y Lorenzo Ramírez.
Las noticias económicas del día con César Vidal y Lorenzo Ramírez.
Las noticias del día con César Vidal y María Jesús Alfaya.
El editorial de César Vidal.
Programa completo de La Voz de César Vidal publicado el lunes 12 de octubre de 2020.
En España, prácticamente no quedan medios liberales. ¡¡¡Ojo!!! Entiéndase liberal en el sentido clásico, no en el norteamericano, que califica como liberales a los que son izquierda, es decir, todo lo contrario del liberalismo. Lo de Estados Unidos tiene una razón de ser histórica porque, a lo largo de su Historia, la izquierda apenas ha existido. Siempre ha habido al frente de la nación una derecha que podía ser más conservadora – los demócratas hasta los años sesenta del siglo pasado – o más liberal, que era el caso de los republicanos. Desde los setenta, y especialmente tras la caída de Nixon, los papeles se invirtieron y con la creciente radicalización del partido demócrata – especialmente tras Clinton y la asunción de la estrategia del arco iris – los términos han significado lo contrario de lo que significan en todo el mundo. En Estados Unidos, los liberals son precisamente todo lo contrario del liberalismo y se corresponden cada vez más con una izquierda descerebrada y ferozmente partidaria de la agenda globalista. No es así en Europa o Hispanoamérica, donde liberal sigue designando al liberalismo clásico. Pero basta de explicaciones. En España, los medios realmente liberales brillan por su ausencia y alguno que insiste en ello es desde hace años un perrillo faldero de la publicidad que le quiera inyectar lo mismo la Caixa – por esa estaría incluso dispuesto a ordenar que se mate – que los poderes públicos. Fue por esa razón que acepte la posibilidad de escribir semanalmente en El liberal, un medio que dirige Jano García – uno de los fenómenos más recientes en redes sociales – y que no depende de publicidades ni pretende dar un mensaje recortado a gusto del que paga. Mi columna se llama Deep South – ya saben, el Sur profundo – y cada semana, desde la misma, les iré contado más cosas de las que ya escuchan en La Voz o ven en www.cesarvidal.tv. Disfrútenlo. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!
Apenas Lucas ha dejado de manifiesto quién es el mesías y lo que se espera de los que desean seguirlo, sitúa el episodio de los setenta. El dato, propio de Lucas, es muy relevante. El mesías y sus discípulos aparecen vinculados estrechamente con la proclamación del mensaje y esa tarea no está vinculada únicamente a doce hombres al estilo de las doce tribus de Israel sino de setenta discípulos que recuerdan, por su número, el de las setenta naciones de las que hablaban los judíos del siglo I. El mensaje de Jesús no quedará limitado a los judíos que durante siglos han esperado al mesías. Por el contrario, se extenderá un día por todo el orbe.
La verdad es que enciende uno la televisión o la radio y es para echarse a temblar. En España, confinando Madrid, el gobierno social-comunista ha dado un paso más en su intento de arruinar la economía española y vender la nación a poderes transnacionales. Como ayuda en esa tarea, está articulando nuevas medidas para que los sicarios de la Agencia tributaria se queden con lo poco que les queda a los ciudadanos y – eso que no falte – cobren sus bonus de recompensa por hundir la vida de sus conciudadanos. En Cataluña, los nacionalistas pugnan por convertir las próximas elecciones en un plebiscito independentista. Mientras la administración de justicia se dedica a servir los intereses de las oligarquías cada vez con menos disimulo. Por supuesto, la Conferencia episcopal sigue pactando con el gobierno mientras saca de la abadía del valle de los Caídos a los benedictinos y los va enviando a otros lugares. Si alguien quiere saber cuál es la conducta habitual de la iglesia católica no tiene más que ver cómo se está comportando con el general Franco que le dio todo, que convirtió España en un protectorado del Vaticano, que sometió a sus deseos buena parte de la legislación, que consintió dejar a España fuera del Plan Marshall para no disgustar a los obispos y a la Santa Sede y cuyos restos han sido exhumados con el permiso expreso de los obispos y el visto bueno del papa. Eso le pasará a cualquiera que se fíe de tan pérfida e ingrata institución.