Continuamos con la escuela madrileña de Lope de Vega y nos detenemos hoy en el que fue su discípulo predilecto, Juan Pérez de Montalbán (1602-1638).
Estudió en Alcalá, se doctoró en Teología y fue ordenado sacerdote.
Vivió activamente la vida literaria de Madrid y se le recuerda sobre todo por su obra Fama póstuma y Los amantes de Teruel.
Fue objeto de despiadadas burlas por parte de Quevedo, lo que probablemente influyó en su locura y su muerte prematura.