Recuerdo habérselo oído decir al padre Arce en una de sus incomparables clases de griego. Los protestantes que había conocido en Inglaterra mostraban un especial celo porque la gente conociera a Cristo y con esa finalidad repartían porciones de las Escrituras por la calle, en especial el Evangelio de Juan.
De Hispania a la segunda cautividad (III): las epístolas pastorales (I): I Timoteo
La comparación de la vida cristiana con un combate tiene sus precedentes en la Biblia. No hace falta decir que históricamente no han faltado las aplicaciones más aberrantes y realmente anticristianas de ese principio.
El Sermón del monte (VII): La Torah (IV): confianza en Dios y amor al prójimo
Tras mi exposición improvisada sobre las razones para ser cristiano, me vi sometido a una batería de preguntas de los presentes.
Alexandra David-Neel formó de aquel grupo de mujeres inquietas que, desilusionadas con la espiritualidad occidental, decidieron emprender el camino hacia Oriente en un intento de saciar su sed de trascendencia. Los resultados, como en todas las empresas, resultaron diversos.
Ayer les dejé la entrevista que Marcos Nehoda me practicó en su iglesia. Puedo asegurarles que yo estaba convencido de que “eso” era todo. Me equivocaba.
El paso reciente por Argentina me permitió no sólo reencontrarme con amigos sino también conocer a otros con los que se sólo había trabado relación a través de las redes.