Que fuera capaz de escribir más de un millar de himnos y que resulten excelentes es buena prueba de ello. Es el caso del que traigo hoy. Buen conocedor de la Biblia, Charles Wesley sabía que ésta enseña no la doctrina de una salvación por obras sino la de una salvación por gracia, apropiada a través de la fe y no por obras para que nadie se jacte (Efesios 2: 8-9). En otras palabras, la salvación es posible no por nuestros méritos - ¿cuáles sin quebrantamos continuamente la ley de Dios? – si no por la gracia, por el amor gratuito, por la bondad inmerecida de Dios. Es esa circunstancia a la que se refiere Wesley en esta canción y lo hace advirtiendo que ni un millar de lenguas entonando al unísono serían suficientes para describir la maravillosa gracia de Dios. Ciertamente es así y lo sabe cualquiera que es mínimamente consciente de lo que significa realmente el pecado y de lo que implicó para Dios enviar a Su Hijo de manera que el que crea en El no se pierda sino que tenga vida eterna (Juan 3: 16).
Les dejo con dos versiones del himno – no conozco versión española, pero eso no quiere decir que no exista – la primera es más clásica y es entonada por el coro de una iglesia bautista; la segunda, más actual, es entonada por la David Crowder Band. Les deseo que las disfruten y, sobre todo, que reflexionen en su mensaje. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!
Ésta es la versión del coro de una iglesia bautista
www.youtube.com/watch?v=3Bm0b1745vA
Y ésta es la de la David Crowder Band