La enseñanza bíblica sobre la Segunda Venida de Cristo apenas tiene lugar en el seno de ciertas confesiones. Por un lado, están tan ocupadas en construirse un reino terrenal lo más rico y poderoso posible que la simple idea de que Jesús pueda regresar y acabar con semejante tinglado tiene que resultar escalofriante para sus dirigentes; por otro, implicaría ya ahora un cambio drástico de sus prioridades y actuaciones. Es lógico que así sea. No en vano la Biblia enseña que el Hombre de pecado se coloca en lugar de Dios y que será la Palabra de Dios la que irá recortando su reino hasta que tenga lugar la segunda venida de Cristo.
Sin embargo, para los cristianos verdaderos la Segunda Venida es una espera gozosa y alegre. Ya entre los primeros era común saludarse con la expresión Maranatha que lo mismo podía significar el Señor viene que Ven, Señor. Sabían que los grandes problemas de la Humanidad sólo serán reparados de manera total y definitiva cuando Jesús regrese.
Esa expectativa se ha repetido a lo largo de los siglos dando lugar a hermosas canciones. La que incluyo hoy nació entre los esclavos como un negro spiritual. Su anhelo era que Jesús regresara ya y se los llevará con él tal y como había anunciado, por ejemplo, él mismo y los apóstoles. Quizá por eso el himno es, a la vez, tan sencillo y tan conmovedor señalando ese deseo de que el carro del Señor se deslice volando bajo y recoja a Sus hijos para llevarlos al verdadero hogar.
Esta canción siempre me ha gustado mucho y ésa es la razón para que hace décadas escribiera una versión en español que, por cierto, llegó a ser cantada en alguna iglesia. Si la memoria no me falla, la letra decía así:
Ven ya
Señor Jesús
Llévame contigo a morar
Ven ya
Señor Jesús
Llévame contigo a morar
Cuando se fue él prometió que prepararía un lugar
Para que los que él redimió
Puedan con él habitar
Ven ya…
Tengo un lugar
Muy lejos de aquí
Dónde con Cristo he de morar
Allá no hay penas y podré ir
Cuando él me venga buscar.
Ven ya…
Pero todo esto es muy secundario y anecdótico. Lo importante realmente es que recuerden ustedes que la única esperanza definitiva del género humano está en Jesús el mesías y que él regresará. Si aún vivimos, algunos sabemos que no faltará a su promesa de llevarnos con él. Si hemos muerto antes, ya estaremos a su lado.
He escogido dos versiones de la canción. La primera – totalmente a capella - es de The Plantation Singers y creo que reproduce magníficamente la manera en que esta pieza musical debió ser cantada en sus primeros tiempos. La segunda es del grande, grandísimo Johnny Cash. Disfrútenlas. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!
Aquí están The Plantation Singers
Y aquí viene Johnny Cash