Diego López comparte su experiencia como ingeniero en el extranjero, centrándose en su tiempo en Vietnam, donde enfrentó desafíos significativos relacionados con la corrupción, la falta de capacitación y la burocracia. A través de su relato, se exploran las dificultades de trabajar en un entorno internacional y la falta de apoyo de las instituciones diplomáticas españolas. Su historia culmina en un audaz escape de Vietnam, lo que resalta la precariedad de la situación de los españoles en el extranjero y la necesidad de una mayor protección consular.