Entre los primeros, hay de todo como en botica; el segundo es una verdadera mafia inquisitorial e intransigente que, con la excusa del reconocimiento de unos derechos hipotéticos, tan sólo intenta conseguir inmerecidas cuotas de poder político y lograr que jovencitos inexpertos caigan en manos de la secta. No pretendo ser original en mis planteamientos. Cualquiera que haya leído libros como Anti-Gay – escrito por homosexuales – sabe que son los homosexuales que conservan un mínimo de decencia moral - no pocas veces exmilitantes del lobby - los primeros que comenzaron a poner el grito en el cielo hace ya décadas. Las razones eran varias. En primer lugar, que el hecho de aislar en un ghetto a un grupo – sea el que sea – es el primer paso para que nunca sea igual al resto de la sociedad. Bien es verdad que los que viven del hecho diferencial suelen sacarle jugosos beneficios. En segundo, que los derechos son una cuestión individual y no de colectivos, salvo que deseemos regresar a la Edad Media y a los fueros. Faltaría más que hubiera derechos especiales para homosexuales, miopes, gordos, calvos, conquenses o farmacéuticos. Finalmente, que a poco que se observe se capta la labor de proselitismo del lobby gay. El último ejemplo lo hemos tenido en Móstoles donde a unos menores de edad se les sometía al cuestionario que reproduzco a continuación:
1. ¿Qué piensas que causó tu heterosexualidad?
2. ¿Cuándo y cómo decidiste que eras heterosexual?
3. ¿Es posible que la heterosexualidad sea sólo una fase que puedas superar?
4. ¿Es posible que tu heterosexualidad se derive de un miedo neurótico a las personas de tu mismo sexo?
5. Si nunca tuviste relaciones con una persona de tu mismo sexo, ¿no podría ser que lo que necesitas es un buen amante de tu mismo sexo?
6. ¿A quién has confesado tus tendencias heterosexuales?
7. ¿Por qué los heterosexuales se sienten obligados a llevar a los demás a su estilo de vida?
8. ¿Por qué insistes en ostentar tu heterosexualidad? ¿Por qué no puedes ser simplemente quién eres y mantenerte tranquilo?
9. ¿Por qué ponen tanto énfasis en el sexo los heterosexuales?
10. Parece haber muy pocos heterosexuales felices. Se han desarrollado técnicas que podrían ayudarte a cambiar. ¿Has considerado la posibilidad de realizar una terapia de aversión?
11. Considerando la amenaza que suponen el hambre y la superpoblación, ¿podría sobrevivir la raza humana si todos fueran heterosexuales como tú?
12. A pesar de la aprobación social del matrimonio, la tasa de divorcio es todavía del 50 % ¿Por qué hay tan pocas relaciones estables entre los heterosexuales?
¿Se imagina alguien la que hubieran organizado Zerolo y el sindicato de las mariprogres si ese mismo cuestionario se les impusiera a los adolescentes, pero cambiando la palabra heterosexualidad por homosexualidad? ¿Les gustaría que alguien le dijera a Zerolo y a los suyos: Pedrín, hijo, estás seguro de que en su día no se te acercó una hembra como es debido? ¿Tolerarían que alguien sugiriera que su homosexualidad es sólo una fase de inmadurez psicológica que pueden superar con el psiquiatra adecuado? ¿Permitirían que alguien cargara contra las relaciones homosexuales sobre la base – probada estadísticamente – de que son menos duraderas que las heterosexuales? Ni por aproximación. Pero ellos tienen bula para colgar sambenitos, imponer disparatados cambios legislativos o adoctrinar a menores de edad sin el permiso de sus padres. ¡Y además son nuestros impuestos los que pagan todo este adoctrinamiento digno de Hitler o Stalin! Desde luego, hay días que a uno se le cae la cara de verdadera vergüenza ajena viendo episodios como éstos.