No deja de sorprenderme la manera en que la gente está dispuesta a dejar correr a los culpables de las mayores atrocidades apelando a principios humanitarios. El sabio Salomón discreparía totalmente de una conducta semejante. Como dejó señalado en esta máxima recogida en el libro de los Proverbios, el pasar por alto la maldad del inicuo, el declararlo inocente, el ponerlo en libertad sin ejecutar la debida justicia es algo tan horrible a los ojos de Dios como condenar a un inocente. Mientras la sociedad no lo comprenda se verá condenada a asistir a crímenes horribles perpetrados por desalmados que siempre encuentran a alguien dispuesto a evitar que se haga justicia con ellos alegando supuestas razones humanitarias. Yo me pregunto entonces, ¿cómo habría que calificar a los que siguen una conducta y unos principios contrarios a un sabio como Salomón?.