Dios mediante, cuando llegue mañana, andaré por Beijing preparándome para el salto al techo del mundo. Espero que esa circunstancia no les impida seguir colaborando con un crowdfunding que está haciendo Historia real de la radio y que, por añadidura, ya permite ver la meta como algo cercano. La alcanzaremos, Dios mediante, si mantenemos el ritmo. Lo mismo puedo decir del campus literario que ya cuenta con más de cuarenta reservas – o sea que si alguien se lo sigue pensando corre el riesgo de no poder ir – y que incluye a gente que viene de otras naciones de Europa y de América. Cuento con sus oraciones para que este viaje sea un éxito y que los otros proyectos lleguen a bien fin. Así podamos reencontrarnos, en persona o a través de las ondas, en el próximo mes de septiembre. Hasta el próximo post, God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!