La época en que Isaías desarrolló su ministerio profético fue especialmente convulsa. Durante el reinado de Uzías, Judá siguió una agresiva política exterior en el curso de la cual sometió a filisteos y árabes y recibió tributo de los ammonitas. Buena parte de ese éxito derivó sin duda de su gasto armamentístico y de sus obras militares (2 Crónicas 26: 15).
Hay veces que una imagen vale más que mil palabras. Hoy no voy a comentar lo que incluyo. Véase el video y sáquense conclusiones sobre el estado al que izquierdas, nacionalistas y derechas han llevado la educación en España. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios las bendiga!!!
Lo escribí desde esta misma tribuna hace ya casi cuatro años. La única manera de que el gobierno actual estabilizara la economía y contuviera la marea nacionalista era intervenir las CCAA.
A pesar de que falta más de un mes, las encuestas relacionadas con las elecciones de diciembre se suceden casi sin pausa mientras los partidos realizan su composición de lugar. Me consta que tanto en el PP como en el PSOE y Podemos circula la especie de que han tocado fondo, que las pérdidas posibles ya están descontadas y que, por lo tanto, las perspectivas pueden resultar halagüeñas.
En las entregas anteriores me he ido deteniendo en algunos de los profetas menores dado que seguimos un orden cronológico. Ya se habrán percatado los lectores de que lo de “menor” sólo puede aceptarse si estamos hablando de la extensión del libro, pero no de su altura espiritual. Esta semana, sin embargo, hemos de referirnos a un profeta que es calificado como “mayor”, calificativo, por otra parte, más que merecido.
He señalado en las entregas anteriores el profundo abismo que media entre nuestra política y la que se puede ver en los círculos de poder de Washington. Ayer mismo un amigo, de la manera más involuntaria, me mostró otra de las diferencias que explican todo.