LOS PRIMEROS CRISTIANOS: LA COMPOSICIÓN ECONÓMICO-SOCIAL DEL JUDEO-CRISTIANISMO EN EL ISRAEL DEL SIGLO I (I): Las clases altas y medias
Hoy viernes, ha comenzado el segundo crowdfunding para la financiación del programa radiofónico La Voz. Como ustedes saben, el primer crowdfunding – que fue un éxito e hizo Historia – se vio tristemente malogrado al pretender una de las entidades colaboradoras quedarse con la mitad de lo recaudado. Semejante conducta – a mi juicio totalmente inaceptable – me llevó a solicitar que se devolviera el dinero a los donantes ya que no lo habían entregado para que fuera a un destino distinto del de pagar a los colaboradores de La Voz, colaboradores cuyos modestos emolumentos había cubierto de manera única y exclusiva quien ahora se dirige a ustedes. Esa fue mi posición y el paso del tiempo ha confirmado que no estaba equivocado.
Como saben los seguidores de este muro, hace un par de semanas estuve dando unas conferencias en la Universidad estatal del sur de Missouri. Se pronunciaron en inglés y, por lo tanto, no son accesibles a todos. Por eso he decidido incluirles junto con el video el texto en español de las conferencias. Es un poco más largo porque tenía que limitarme a 40 minutos y hubo que seleccionar sobre la marcha en el material que tenía escrito. Salen, por lo tanto, ustedes beneficiados sobre los alumnos de Missouri. Espero que las disfruten y que no se asusten al escuchar la música de presentación. Yo tampoco estoy acostumbrado a dar una conferencia antecedido por un pasodoble torero. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!
Ayer tarde, tuve que ir a Miami Beach. Como el trayecto era largo, el conductor y yo comenzamos a conversar. Al cabo de un par de minutos, me dijo que era un refugiado sirio. Había logrado llegar hasta Tel Aviv y desde allí había viajado a los Estados Unidos. Su visión de lo que estaba sucediendo en su país natal era pesimista.
Mira que se han gastado dinero que es de todos para hacer propaganda en el extranjero y que alguien se creyera sus mentiras históricas. La gente inteligente e informada no los cree.