Si tuviera que compendiar los graves problemas con los que se enfrenta Honduras – inseguridad ciudadana, corrupción… - y la esperanza de que pueda superarlos tendría que referirme forzosamente a la ASJ, la Asociación para una Sociedad más justa.
La Historia del Gospel está llena de episodios no sólo prodigiosos sino verídicos. Uno de los más recientes se produjo en Atlanta, en la noche de un 31 de marzo.
Hoy no habrá personaje histórico de la serie, pero las razones son más que justificadas. A este lado del Atlántico, me llega la noticia del fallecimiento de María Antonia Iglesias.
Fue Bertolt Brecht el que lo expresó de manera genial en su drama El resistible ascenso de Arturo Ui. El nacional-socialismo alemán no era inevitable ni estaba predestinado a triunfar. Simplemente, se había valido de los peores recursos y los que tenían que haberlo frenado no lo habían hecho. El paralelo con la historia de Jordi Pujol salta a la vista.
Hace unas horas me ha llegado un mensaje de uno de los paseantes del muro. Es tan elocuente que no necesita comentarios. Si acaso el de preguntarse cuántas veces sucederá todo esto a lo largo del año, del mes o incluso del día. Hay cosas que - es obvio - no cambian en España y así va todo con gentes e instituciones convencidas de que la ley no va con ellas. Les dejo, pues, con el mensaje.
Como yo me imaginaba, la experiencia hondureña está exigiendo muchas horas de trabajo, pero está resultando gratificante. Nada más llegar tuve la primera entrevista de radio y de televisión – Mayavisión, no te olvido – y debo decir que en ambos casos se trató de entrevistas de una hora y que los periodistas sabían de lo que hablaban.
Mis amigos de http://www.cesarvidal.com y los paseantes de las páginas de Facebook de César Vidal y Es la noche de César tendrán que ser comprensivos conmigo en estos días. La razón no es otra que voy a pasar una semana entera en Honduras dedicado a las más diversas actividades. Seguiré colgando post y respondiendo a los comentarios, pero andaré menos libre de tiempo. Una vez más espero que sean benevolentes conmigo.
Papado, obispos, clero… cuando se examina objetivamente su estado a finales del s. XV e inicios del s. XVI, el panorama resulta verdaderamente desolador. No puede sorprender que en semejante contexto la situación espiritual del pueblo llano resultara deplorable convirtiendo la Reforma en algo más indispensable si cabía.